martes, 7 de diciembre de 2010

Pequeño Milagro

Marcho por la ruta
entre pocas frondas
y campos ariscos.
El cerro me nombra.

La tarde es muy clara.
otoño es patrono
y en bíblico sábado
yo lo observo todo.

Me arrimo a los cercos
temiendo el peligro.
Maizales muy verdes
se muestran amigos

Enfrente, las viñas,
cepas vendimiadas
tienen un aspecto
de viejas cansadas

Al volver a casa
mi ceibo me obsequia
una vara larga
con labios de fuego,

y flecos de grana
muestra el plumerillo
en un pincelazo
de color y brillo.

¡Ay, mis locas plantas
sueñan con diciembres,
porque un sol de marzo
las besó sonriendo!

No hay comentarios:

Publicar un comentario